Una vejez sin ataduras
Hace poco más de año y medio el equipo de trabajadores del centro Elías Martínez Santiago se plantearon un nuevo reto tanto personal como profesional: el cambio de mirada hacia un cuidado digno a las personas mayores.
La propuesta de aceptar ciertas mejoras en su forma de trabajar hasta entonces generó en el equipo: miedos, dudas, desconfianza, resistencia a salir de la zona de confort… Cuando el equipo tomó conciencia de los beneficios del cuidado sin sujeciones empezaron a adoptar el modelo de atención centrado en la persona. Este modelo aporta un nuevo enfoque para los cuidados poniendo en valor la toma de decisiones en su proyecto de vida dando sentido a la misma.
De esta manera, comenzaron un proceso de formación y trabajo personal con varias fundaciones (Mattia, María Wolff) quienes elaboraron estudios conductuales personalizados de cada una de las personas que presentaba sujeciones físicas donde evaluaron aquellas alteraciones conductuales, reuniones con familiares explicándoles aquellas actividades adaptadas a su propia historia de vida y necesidades, buscando de manera conjunta aquellas debilidades, amenazas, oportunidades y fortalezas de cada uno de ellos. También establecieron y establecen acuerdos en equipo de los productos de apoyo adecuados según la peculiaridad de cada situación y de su evolución en el tiempo.
El equipo no solo ha sabido salir de su rol profesional anclado, sino que ahora disfruta de ello. Hicieron especial hincapié en acompañar tanto en el planteamiento como en el desarrollo de actividades significativas que contribuyen a mantener las medidas ambientales y organizativas establecidas. La creación de actividades novedosas, atractivas y con sentido para la persona son herramientas para fomentar el sentimiento de utilidad aportando conocimientos y experiencias previas.
Todo este trabajo en equipo ha sido muy gratificante a todos los niveles. La recompensa no son solo sus miradas, sonrisas o interacción activa sino la conciencia de un cuidado de calidad, consecuencia del respeto de la dignidad y principio de autonomía de la persona. Por todo este camino recorrido pueden decir que es un centro acreditado libre de sujeciones.