En los talleres de destrezas manipulativas en la residencia Albertia Babilafuente, este mes se han realizado trabajos con plastilina para mejorar la motricidad fina de los usuarios.
Las destrezas manipulativas y manualidades forman parte del envejecimiento activo para mejorar la calidad de vida de los residentes. Para realizar algunas manualidades se necesitan instrumentos específicos, sin embargo, la plastilina es un material magnífico para realizar manualidades al alcance de todos sin mostrar mayor dificultad añadida. Trabajar con plastilina promueve múltiples beneficios tanto a nivel físico como psicológico por ello se utiliza como técnica terapéutica. Al manipular la plastilina se impulsa la creatividad y se descargan tensiones acumuladas en nuestras manos fomentando la psico-motricidad fina, además de ponerse en marcha proceso cognitivos atencionales, de memoria y de concentración.
Durante estas sesiones de destrezas manipulativas, los residentes tienen la opción de trabajar libremente con la plastilina, haciendo uso de su propia creatividad para elaborar todo tipo de figuras, utilizando un solo color o varios colores diferentes a su elección. Otra forma de trabajar con plastilina es utilizar un patrón de modelado para elaborar una figura. Se le entrega al residente un modelo y lo utiliza como ayuda para elaborar su creación. Cabe destacar que la finalidad de la actividad no es realizar una figura lo más exacta posible sino manipular el material, fomentar la creatividad y sobre todo disfrutar de la actividad. Por ello, con el simple hecho de manipular la plastilina ya se obtienen beneficios físicos y psicológicos.
La elaboración de figuras con plastilina de forma manipulativa mejora el físico de los residentes, así como la prevención y reducción de enfermedades como la artrosis, ya que son tareas que se realizan con las manos y mejoran los movimientos de las mismas evitando que pierdan fuerza, elasticidad y movilidad.
Al ser una actividad grupal se potencian las habilidades sociales mejorando la socialización de los residentes, el estado de ánimo, la autoestima y la confianza de sí mismos al intercambiar ideas. Por lo general, resulta ser una actividad muy relajante y gratificante para los residentes, mostrando un disfrute personal y bienestar emocional durante la misma.
