En la residencia de mayores Las Vegas, gestionada por grupo Albertia, celebraron la Nochebuena con un taller de cocina muy dulce.
Durante este día de celebración de la Nochebuena, en la residencia Las Vegas decidieron realizar una actividad especial. Se trataba de un taller de cocina, en el que crearon una tarta de chocolate y café sin horno, como las clásicas tartas de galleta de las abuelas.
Para poder llevar a cabo este taller, lo primero fue ver qué ingredientes necesitaríamos. En este caso, para una tarta para 10 personas hacía falta:
– Café, 200 ml.
– Chocolate negro, 225 gr.
– Leche condensada, 200 gr.
– Nata líquida, 180 ml.
– Galletas rectangulares, 250 gr.
– Cacao en polvo, al gusto.
Los mayores salieron al supermercado a comprar los ingredientes de la tarta
Fueron al supermercado de la zona para comprar todos los productos que necesitaban, De esta manera, se ubicaron en su entorno, al tener que recordar cómo ir al supermercado. Además, debían orientarse dentro del establecimiento para encontrar los ingredientes, así como recordar el manejo del dinero.
Ya con todo preparado, era hora de hacer la tarta. Para ello, prepararon el café y lo dejaron enfriar completamente. Mientras el café se enfriaba, fundieron el chocolate. Para ello, lo cortaron en onzas y las introdujeron en un recipiente hondo, calentándolo en el microondas durante 2 minutos.
Cuando el chocolate se encontraba fundido, removieron y añadieron la leche condensada y la nata líquida. Removiendo bien hasta obtener una mezcla homogénea. Después colocaron la mezcla en una jarra para que fuera más fácil el proceso de montaje. Forraron un molde con film transparente para montar la tarta.
Sumergieron una galleta en el café, sin empapar, y la colocaron en la base del molde. Repitiendo la operación, se cubrió la totalidad de la base. Sobre ella, extendieron una capa de chocolate. De este modo, se alternaron capas de galletas y chocolate, hasta terminar con una de galleta. Se tapó con el film y lo dejaron en el congelador. Necesita como mínimo 3 horas de frío.
La sacaron del congelador 30-40 minutos antes de consumir para que sea más fácil desmoldar y repartir. Espolvorearon cacao en polvo, y ¡a disfrutar!
