Desde hace varios meses, en la residencia para mayores Albertia Moratalaz de Madrid, se imparte la novedosa TNF «T2E®: Terapia de Estimulación Emocional».
La Terapia de Estimulación Emocional T2E® es la única Terapia No Farmacológica (TNF) que trabaja específicamente con emociones y estados de ánimo. Permite a Terapeutas Ocupacionales, Psicólogos o Psicopedagogos hacer sentir a personas con problemas de memoria una variedad de 32 emociones positivas diferentes. Podéis conocer más sobre ella en el siguiente enlace: http://www.mariawolff.org/presentacion-investigacion-e-innovacion/t2e. En la residencia para mayores de Madrid «Albertia Moratalaz», se oferta a los residentes desde el departamento de Psicología.
El pasado 05 de octubre estimulamos una de nuestras emociones favoritas: PASIÓN AMOROSA.
Ese deseo intenso de relacionarnos con alguien, esa atracción intensa, pasional y arrebatada hacia alguien, que altera bruscamente el funcionamiento orgánico, emocional y cognitivo de la persona y genera un bienestar intenso en presencia (e incluso en ausencia) de aquel que provoca tales emociones. Estar junto a esa persona se convierte en necesidad y deseo. Es una experiencia plena y embriagadora.
El inicio de la sesión fue algo tímido hasta que conseguimos llegar a la fase de calentamiento. En ella, nuestros participantes llegaron a experimentar y a volver a sentir aquellos besos intensos de película, intercambio de caricias, arrumacos, etc. Ellas comentaban que en su época, estos actos en público era un tabú.
Durante la sesión hemos podido evocar la pasión amorosa mediante imágenes. También compartiendo anécdotas íntimas, experiencias vivenciales con el resto de compañeros. Escuchamos la canción de “Bésame mucho” y “Si tú me dices ven”. La música nos transportó a momentos amorosos muy pasionales de la vida de cada una de las asistentes. Así, hablamos del primer beso, la primera experiencia amorosa, el primer flechazo. Cómo nos fue en el amor, lo que sentimos, la importancia de seguir sintiendo esa pasión en nuestra vida. Al final de la sesión, repartimos unos iconos de corazón que cada participante se colocó en la solapa. Así quisieron demostrar que todavía siguen sintiendo esta emoción con tanta pasión como el primer día. Una sesión apasionante llena de suspiros, risitas, hasta pupilas dilatadas, digna de T2E®.
